Iglesia de San Francisco, Teruel
El
templo consta de una sola nave dividida en cinco tramos, con capillas entre
contrafuertes abiertas a la nave a través de arcos apuntados. Todo el espacio
se cubre con bóvedas de crucería sencilla reforzada por arcos fajones también
apuntados, mientras que la cabecera poligonal de cinco lados se cubre con
crucería de seis nervios.
Los
nervios de las bóvedas apean en haces de columnillas que se adosan a los muros
de la nave.
Exteriormente
la construcción destaca por la pureza de líneas, utilizando buen aparejo de
sillería en el que quedan destacados los contrafuertes por encima de las
capillas laterales; en los tramos de la nave separados por los contrafuertes se
abren esbeltos ventanales ojivales, que presentan labor de tracería con rosetas
y tres huecos divididos por dos maineles. El acceso al interior se realiza
mediante dos portadas abiertas en sus lados oeste y sur: ambas son apuntadas y
constan de varias arquivoltas, destacando el hastial, de frontis triangular,
dividido en dos cuerpos, abierto el superior mediante gran óculo con labor de
tracería, y el inferior albergando la portada, entre contrafuertes; esta es
apuntada, bajo gablete y un friso de arquillos apuntados muy esbeltos. La
portada sur es muy parecida, aunque no presenta gablete, y el friso de
arquillos ciegos es menos estilizado.
Anexo
a la iglesia se encuentra el convento de los franciscanos, construido en 1910
en el lugar donde se encontraba el antiguo convento desde el siglo XIII.
Patrimonio Cultural Aragonés, SIPCA
Foto postales, años 1910
turoliense.aun2020
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