Santuario de la Virgen de la Fuente. Peñarroya de Tastavins 1969

    
    

Santuario de la Virgen de la Fuente, 1969

A dos kilómetros de Peñarroya de Tastavins, en la carretera de Monroyo a Calaceite, se halla un reconocido Santuario bajo la advocación de la Virgen de la Fuente.

El templo más moderno es del siglo XVII, de estilo renacimiento muy avanzado y con intromisiones de estilos posteriores. Se debe a Pedro Estrada, maestro cantero de Alcañiz y a Cristóbal Antolin, sacristán del Santuario. La obra carece de interés arquitectónico, si bien es entonado y proporcionado todo su conjunto de naves, cúpula y camarín-sacristía.

Reviste mayor importancia el otro templo antiguo, del siglo XIII-XIV, habiendo sido este base fundamental para otorgarle la calificación de Monumento Nacional.

Se trata de una construcción gótica, de una nave sola, asunto relativamente corriente en Aragón, ya que con gran sencillez se resolvía el problema de orden artístico. Esa única nave presenta una cubierta de madera, tipo gótico-mudéjar, en cuya decoración intercienen lacerías pintadas y de relieve, escudos heráldicos de la nobleza de aquel tiempo y numerosos motivos decorativos. Se ven varios escudos y muy repetida la Cruz de la Orden de Calatrava. Es una techumbre muy parecida a la de la Catedral de Teruel.

Toda su techumbre con abundantes elementos tallados y pintados en madera de carácter gótico, se apoya en cuatro arcos góticos apuntados, moldurados en sus aristas, sosteniendo columnas ochavadas y redondas. Sus sencillos capiteles ostentan temas florales, figuras humanas y animales fantásticos. Todo ello contribuye a que, aún despojado de sus retablos y detalles suntuarios de orden religioso, produzca la nave en su conjunto una memoria imperecedera. En el fondo o abside se conserva todavía un ventanal con elegante tracería y con archivolta decorada. A un lado del mismo fondo otro más pequeño, muy bien conservado, pero ambos tapados.

Podrá tener el Santuario en su exterior una modesta apariencia, pero también una portada preciosa con sus arcos de molduras y embocadura. Su parte vertical con abundantes perfiles en basas de extraordinario relieve, y una zona de capiteles en la que se ven entre elementos vegetales, un buen número de escenas de la Sagrada Escritura tratadas con gran animación.

Sobre las ojivas de los arcos hay un sector con elementos góticos, que en muchos casos acusan la mano popular en la parte de las figuras, a pesar de que se trata de escultores de la época. Dignos del mayor interés. Merecen también estimación las dos hojas de las puertas de madera que forman el cerramiento del Santuario. Su originalidad las hace acreedoras de la mayor atención. Es una laceria continua en la que forman los cuatrifolios y las estrellas de ocho puntas, alternándose, integrando un vistoso conjunto, aun cuando hayan desaparecido molduras y tallas sobrepuestas que constituían la decoración de la parte alta.

Se halla adosado a este Santuario el edificio que fue Hospedería en tiempos de grandes peregrinaciones de la comarca y aun en tiempos recientes; según datos fidelignos pertenecía a la Orden de Calatrava, encargada de enriquecerlo en tiempos de su permanencia. El Santuario antiguo y la Hospedería forman un cuadrilátero de edificios con un patio interior de graciosa arquería de varios estilos que marcan los diversos tiempos en que se fueron construyendo según las necesidades.

Todo muy armónico y proporcionado. Necesita una buena reparación, pero francamente es algo que daría un conjunto sencillamente extraordinario.

    Informe sobre la ermita de la Virgen de la Fuente 
situada en Peñarroya de Tastavins (Teruel).

     Peñarroya de Tastavins, 8 de mayo de 1969.

    Fotografías: AHPTE 
Texto recuperado por: Alfonso Utrillas Navarrete


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